Aves

CONSEJOS SOBRE CUIDADOS DE MASCOTAS EXÓTICAS

Yacos (Psittacus erithacus)

CONSEJOS SOBRE CUIDADOS DE MASCOTAS EXÓTICAS DE GMCAE-AVEPA
(Grupo de Medicina y Cirugía de Animales Exóticos - Asociación de Veterinarios Españoles Especialistas en Pequeños Animales)

María Ardiaca, veterinaria del Centro Veterinario Los Sauces, dirige este proyecto de GMCAE-AVEPA sobre el desarrollo de estos documentos para difundir la información sobre el correcto cuidado y alimentación de distintas especies de mascotas exóticas.

No siempre es fácil encontrar información necesaria para un correcto cuidado de su mascota. Además en algunas ocasiones la información que recibe el propietario es contradictoria e incluso perjudicial para el animal. Por este motivo surgió este proyecto con el fin de proporcionar unos documentos fiables y aprobados por el comité científico del GMCAE-AVEPA.

Para visitar la página del GMCAE-AVEPA y consultar los documentos haga clic aquí.

Periquitos (Melopsittacus undulatus)

ALIMENTACIÓN:

Es tremendamente difícil conseguir una dieta equilibrada a base de semillas y comida casera. Una dieta desequilibrada conduce siempre a enfermedad. Consulte con el veterinario.

La forma más fácil de alimentar correctamente a su periquito es utilizando un pienso compuesto extrusionado que impide que el periquito selección sólo las semillas que más le gusten (consúltenos).

Fruta y verdura: todos los días pequeños trocitos. Cuanto más variada-mejor. Suelen preferir verdura de hoja.

No deben tomar nunca aguacate, chocolate, alcohol ni alimentos muy salados.

Necesita disponer siempre de comida y agua limpia.

Pueden colocarse huesos de sepia o piedras de calcio en la jaula.

Los suplementos vitamínicos no son necesarios si la alimentación es correcta. Algunos pueden ser perjudiciales.

DESPARASITACIÓN:

No suele ser necesaria la desparasitación interna.  Si el periquito vomita podría tratarse de tricomoniasis, una enfermedad poco frecuente pero muy grave.

Los periquitos pueden tener parásitos externos (ácaros). Si su periquito se rasca o tiene rugosidades en el pico, consulte al veterinario. Los spray antiparasitarios que suelen estar a la venta en las tiendas no son efectivos.

CUIDADOS DIARIOS:

Los posaderos deben ser rugosos y anchos de modo que mantenga el pie casi estirado.

Es recomendable ofrecerles una bañera para refrescarse, sobre todo en verano. Pueden pulverizarse con agua 1 vez al día si les gusta.

No use nunca arena para gatos. El mejor sustrato para poner en el fondo de la jaula es el papel.

Nunca deje al periquito suelto por casa sin vigilancia.

Coloque la jaula un lugar luminoso. Es bueno que tomen el aire y el sol siempre que el tiempo lo permita (cuidado con exceso de sol y calor en verano).

SALUD:

Si un ave ha dejado de comer - le ocurre algo grave. Suele ser bastante difícil reconocer los primeros indicios de enfermedad en un periquito. Entre otros, son motivos para alarmarse los siguientes síntomas:

  • Está apagado o duerme más de lo normal.
  • Tiene postura anormal o sacude la cola al respirar.
  • Bebe mucha agua.
  • Tiene heces líquidas o de color anormal.
  • Elimina excesiva cantidad de orina.
  • Tiene abultamientos.
  • Come más o menos de lo normal.
  • Tiene vómitos.

No medique al ave por iniciativa propia o consejo de personas no especializadas. La mayoría de los medicamentos para personas y los que se venden en las tiendas sin control médico son muy tóxicos para los periquitos.

Si ya tiene periquitos en casa y compra un ave nueva siempre haga la cuarentena. Consulte al veterinario.

GRANDES MENTIRAS SOBRE LOS PERIQUITOS:

No es cierto que los periquitos sólo deben comer mijo. Una dieta monótona acaba siendo causa de enfermedad.

Las dietas a base de mijo son anticuadas. Hoy se sabe que no son equilibradas. En términos nutricionales sería como alimentar a un niño con tocino, panceta, chorizo y patatas todos los días.

Si el periquito ya es adulto puede ser difícil convencerlo para que acepte alimentos nuevos.  No debe forzarlo haciéndole pasar hambre. El veterinario le aconsejará y le proporcionará trucos e ideas para conseguir que el pequeño cabezota cambie de opinión.

No es cierto que la fruta y la verdura les produce diarrea. La fruta y verdura contienen bastante agua y al tomarlas el periquito orina más. Es totalmente normal.

No es cierto que el periquito viva mejor confinado en la jaula porque se siente más seguro. Es conveniente que salga, siempre bajo vigilancia. El ejercicio físico y mental son beneficiosos para él.

No obstante debe tener en cuenta que un periquito que ha estado muchos meses en una jaula puede tener miedo o ansiedad al salir de ella por primera vez. Déjele que vaya poco a poco. Puede colocar algo de comida fuera para acostumbrarlo a posarse primero en la puerta abierta.

También debe tener precaución con algunos peligros para el ave suelta:

  • Choques con ventanas.
  • Intoxicación con metales por jugar con mecheros, envoltorios metálicos de corchos de cava o vino, plomillos de las cortinas, lentejuelas, algunas joyas de bisutería, objetos de cristal de colores, barnices y pinturas de cuadros, radiadores y sobre todo antigüedades.
  • Quemaduras en la cocina o con cigarrillos.
  • Ataques por otros animales (perros, gatos, hurones, loros, cotorras, inseparables, etc).

Loros

DIETA RECOMENDADA PARA PSITACIDAS

La dieta ideal de estos animales debe de componerse de tres grupos básicos de alimentos:
  1. PIENSO COMPUESTO DE ALTA CALIDAD. Es la base de la dieta. Debe de constituir al menos un 70 % de la misma. Algunas de las mejores marcas son: Harrison’s, Kaytee, Zu-Preem, Zeigler, Wagner, Hagen, NutriBird, Pretty Bird, etc...
  2. FRUTAS Y VERDURAS. Incluyen cualquier verdura o fruta que se tenga disponible. Lo mejor es el brécol, judías verdes, zanahoria, espinacas, berros, pimientos y tomate.


También manzana, pera, naranja, melón, sandía, plátano, limón, piña, fresa, albaricoque, melocotón, uvas, dátiles, papayas, chirimoyas, zanahoria, tomate, pepinos, calabacín, calabaza, lechuga, acelgas, brócoli, coliflor, repollo, perejil, maíz... cualquier fruta o verdura que se nos ocurra, bien cruda o hervida.

3.   OTROS ALIMENTOS: una vez por semana pueden ofrecerse los siguientes alimentos:
  • LEGUMBRES: crudas remojadas o cocidas.
  • ALIMENTOS DE ORIGEN ANIMAL: yogur, queso, carne, jamón (siempre con poca sal). No conviene dar leche, ya que puede producir diarrea.
  • ALIMENTOS RICOS EN HIDRATOS DE CARBONO: sin abusar pueden comer pequeños trocitos de pan, galletas, bizcocho, etc.  arroz, pasta o patatas cocidas.

ALIMENTOS PROHIBIDOS: AGUACATE (puede ser tóxico), CHOCOLATE, ALCOHOL, CEBOLLA, AJO, HUESOS DE FRUTAS.

CUIDADOS GENERALES:

  1. Pulverizar al ave con agua 2-3 veces al día o poner humidificador. El plumaje y el sistema respiratorio de su loro necesitan humedad.
  2. Cuando hace buen tiempo conviene sacarlos al aire libre (cuidado con el sol y el exceso de calor en verano).
  3. No deje nunca a su loro suelto por la casa sin vigilancia.
  4. Algunos objetos tóxicos para su loro son: mecheros, bisutería, plomillo de las cortinas, cables y otros objetos que contengan plomo, zinc o cobre;  algunas pinturas (marcos, pintura de radiador, etc.), algunas plantas (consulte al veterinario).
  5. Problemas de comportamiento en loros: picaje

    El picaje es una alteración del comportamiento importante, compleja y, en general, difícil de tratar.

    Esto es una guía orientativa sobre el posible origen psicológico del comportamiento del picaje. No pretende ser una verdad absoluta ni una de solución fácil y garantizada. Cada loro es un individuo único y tiene su personalidad y temperamento particulares, pero todos se caracterizan por una gran inteligencia.

     

    COMPORTAMIENTO EN LA NATURALEZA.

    En estado silvestre los loros dedican la mayor parte del tiempo a las tareas diarias tales como la búsqueda de alimento, interacciones sociales y acicalamiento. Estas 3 tareas básicas constituyen comportamientos esenciales para la salud mental y el bienestar del animal. La búsqueda de comida y el acicalamiento son comportamientos instintivos, es decir, el loro nace con ellos. Las interacciones sociales, sin embargo, al igual que en los humanos, son aprendidas a lo largo de la vida, especialmente durante el periodo de infancia y juventud. El equilibrio entre estos 3 comportamientos es fundamental para la salud mental.

    Uno de los problemas asociados al estado de cautividad es la supresión del comportamiento de búsqueda de comida: el loro siempre la tiene disponible en abundancia, tan sólo tiene que ir al comedero. En vez de las 6-18 horas diarias, la alimentación tan sólo ocupa 15-20 minutos al día. Las interacciones sociales se ven alteradas debido a que el ave vive en una “bandada” de humanos. Esta última alteración es aún mayor cuando los propietarios están fuera de casa durante horas y el loro se queda sólo (que es totalmente antinatural). Todo esto altera el equilibrio entre los 3 comportamientos básicos: como el loro ya no gasta tiempo en buscar comida y queda privado de la posibilidad de interacciones sociales, exacerba el comportamiento de acicalamiento llevándolo al extremo de cortar o arrancarse las plumas o, en casos más graves, incluso hacerse heridas.


    Nuestro objetivo sería proporcionar a nuestra mascota herramientas para que pueda desarrollar sus comportamientos instintivos de una forma más natural y enseñarle un comportamiento social saludable que fomente en él/ella sensación de seguridad y autoestima. El equilibrio mental y psíquico es el mejor aliado para la salud física.

    ¿QUÉ PODEMOS HACER EN CASA PARA FOMENTAR UN COMPORTAMIENTO SANO Y NATURAL?

    1. BÚSQUEDA DE ALIMENTO:

    • Dieta equilibrada a base de un pienso de buena calidad. La cantidad de comida también es importante, debemos evitar el exceso que conduce a la obesidad, hiperactividad, celo continuo, alteraciones del comportamiento social, etc.
    • Fruta y verdura: no más de 1-3 tipos de fruta/verdura cada vez (para no crear sensación de superabundancia). Es preferible variar de un día a otro que ofrecer una gran variedad un mismo día.
    • Restringir otro tipo de alimentos. Si a su ave le gusta algo en particular (pipas, cacahuetes, galleta, zumo, etc...) haga que tenga que “ganarse” ese premio, mediante ejercicios de educación/adiestramiento o comportamiento de búsqueda.
    • Fomentar el comportamiento de búsqueda:
      • Posaderos escondites de comida: perchas de madera natural sin tratar con agujeros en los que se esconden semillas u otros premios.
      • Podemos usar también cocos vacíos, cajitas, etc.
      • Envolver los comederos con papel de cocina, periódico o cartón.
      • Envolver individualmente las piezas de comida. Podemos hacer “caramelos” o “cucuruchos” con trozos de pienso y/o unas pocas semillas. No todos los “caramelos” deben contener comida.
      • Mezclar la comida con objetos no comestibles (sustrato de coco o tronquitos de serrín). Algunas especies pueden verse muy estimuladas por una caja de arena o grit que contenga comida.
      • Juguetes pinchafruta o escondites de premios: existen multitud de juguetes en el mercado destinados a que el loro use su habilidad e inteligencia para conseguir la comida.
      • Entrenamiento/adiestramiento: reserve las golosinas para premiar a su loro cuando realiza un comportamiento deseado. De esta manera está proporcionándole una modificación del comportamiento natural de búsqueda de alimento y consigue una buena interacción social (además de un buen pasatiempo y unos momentos muy divertidos).

    Es posible que el ave necesite que le enseñe que “ahí dentro hay comida”. Puede empezar a hacer agujeros en el papel o cartón que envuelve la comida o sacar un premio escondido en un agujero y comérselo o hacer cómo que se lo come (es importante no compartirlo con el ave, sino enseñarle a que debe sacarlos él mismo).

    2. CUIDADO DEL PLUMAJE Y ACICALAMIENTO:

    Pulverice a su ave con agua limpia todos los días. La pulverización suave estimula un acicalamiento normal y mejora la calidad del plumaje.
    • Si su loro se asusta, pulverice primero hacia un lado o hacia arriba, mientras le habla para tranquilizarlo. No es necesario apuntar al ave, es suficiente con pulverizar hacia arriba dejando que una fina niebla descienda sobre el loro.
    • La pulverización puede realizarse mientras el ave está fuera de la jaula y usted está pasando un tiempo con él. De esta manera se combinan el comportamiento de cuidado de las plumas con interacciones sociales.
    • Ofrezca un objeto para que sea acicalado (que pueda ser destrozado): por ejemplo un cepillo de cerdas naturales, un borlón de esparto o un plumero (sin teñir). Puede jugar con estos objetos y “acicalarlos” usted mismo hasta que el loro se habitúe a ellos. Algunos loros aprenden a acicalar estos objetos en vez de destruir su propio plumaje.
    • Utilice sólo agua limpia para la pulverización. Desgraciadamente en el mercado y en Internet encontrará muchos productos y consejos con supuesta acción beneficiosa para el plumaje. Muchos de ellos son incluso perjudiciales.

    3. INTERACCIONES SOCIALES - EDUCACIÓN BÁSICA.

    En la naturaleza las aves adultas enseñan el comportamiento social adecuado a las aves jóvenes.   Además, siendo animales muy inteligentes, los loros mantienen su capacidad de aprendizaje durante toda la vida, como los humanos.  En cautividad nosotros seremos su bandada y debemos asumir el papel de mentores. A los loros les gusta aprender cosas nuevas. Claro que esto no significa que quieran hacer el payaso en cualquier momento a nuestro antojo, pero sí les gusta utilizar y mostrar su inteligencia.

    Necesitan compañía todos los días. Enséñele objetos nuevos (evitando los peligrosos), juguetes diferentes, háblele, cuéntele lo que hay alrededor mencionando los colores, texturas, lugares, etc. ¡Tienen una capacidad de entendimiento de nuestro lenguaje oral sorprendente!

    Como parte de la convivencia y educación básica como mínimo debemos enseñarles una serie de órdenes: sube, baja y ahí. No se trata de órdenes absurdas que el loro tiene que hacer por narices o porque nos da la gana, sino de comportamientos aprendidos básicos para entendimiento y relación entre personas y loro, de una manera similar a como educaría a un niño.
    • “Sube” - Este acto es la base de la educación de su loro. Sitúe su mano a la altura de las patas del loro, tóquelas suavemente y diga “sube”. Una vez que el loro ha colocado una pata sobre su mano sujétele suavemente por los deditos y elévelo de forma que termine de posarse en la mano. La mano debe estar firme; si tiembla o muestra movimientos inseguros y con miedo, el loro percibirá inestabilidad o peligro y no querrá subir. La mayoría de los loros mansos no necesitan golosinas como premio sino unas efusivas muestras de alegría por parte de su dueño (que muchas ves son el mejor premio).

    Si el loro no es manso, puede ser más recomendable intentar “sobornarlo” con golosinas (trocitos de nuez, pipa...). Si el loro responde a la tentación, cómase la golosina con evidentes signos de gustaz o.

    Si le da mucho miedo que el loro pique, puede recurrir a cubrirse la mano con una toalla (no use guantes) hasta que la confianza y el entendimiento mutuos entre loro y usted sea mayor.

     

    • “Baja” - También es una orden importante para que pueda guiar los movimientos de su loro. Para esta orden debe situar la mano en la que está posado el loro algo más baja que la percha a la que quiere que vaya. El loro debe estar de cara a la percha. Lentamente gire la mano hacia la percha, haciendo que el loro se incline hacia delante a la vez que pronuncia “baja”. Muchos loros se apoyarán en la percha con el pico antes de pasar las patas.

    Es importante que se cumpla la norma de que “sube” siempre significa “sube a la mano” y “baja” – “baja de la mano a cualquier otro objeto”.
    • “Ahí” - mantenerse en la percha donde ha sido posado cuando está fuera de la jaula es parte de comportamiento social normal del ave. Nos permite enseñar al loro a estar junto a nosotros, igual que lo haría con otro loro, y no sobre nosotros (lo cual es un comportamiento aberrante y que lleva generalmente a trastornos psíquicos como inseguridad o agresividad).

    Enseñar “ahí” a nuestro loro evita también que deambule por la casa libremente. Estar suelto por la casa aumenta significativamente el riesgo de traumatismos e intoxicaciones. Desde el punto de vista psicosocial, un ave suelta por casa tiende a desarrollar una relación de dependencia excesiva o incluso de pareja con una sola persona.

     

    Para enseñar “ahí” son ideales las perchas o parques portátiles (para poner encima de la mesa o las de pie alto para el suelo). El loro no debe quedar más alto que las personas. Premie al loro verbalmente, con caricias y/o golosinas mientras se mantiene en la percha. Salga de la habitación durante un par de minutos y luego regrese para premiar al loro si se ha mantenido en la percha.

    Si el loro intenta bajar de la percha o empieza a trepar hacia arriba, simplemente vuelva a colocarlo en la percha sin decir palabra. Puede trabajar con otros estímulos positivos (juguetes, golosinas escondidas, pulverización, etc...) para que el loro comprenda y acepte que estar en la percha es bueno para él.

    La educación requiere dedicación y tiempo, pero es necesaria. Al ser tan inteligentes, la educación de los loros es un cuento de nunca acabar ya que aprenden y nos ponen a prueba durante toda la vida.